:: Diario de a bordo ::

Claro queda que las decisiones que tomamos siempre incluyen una renuncia.

Yo he decidido venir aquí, a Lille, a Francia para vivir mi año Erasmus y aprender la conocida “lengua del amor”. Mi decisión fue seguir construyendo mi futuro, añadiendo ladrillos al pilar de mi educación, el cual luego determinará mi puesto de trabajo, eso y las ganas, la ilusión y sentimiento que yo le eche.

Esa ha sido mi decisión. Y ¿Cual ha sido mi renuncia?
Al irme de mi casa he renunciado a la comodidad de tenerlo todo, prácticamente, hecho: Comida, ropa, compra… , ha ver a mi familia tooodos los días y contarles que me ha sucedido en clase mientras comemos; ir a clase con los mismos compañeros, desde primero, con sus bromas, con nuevas ilusiones en cada trabajo y nuevos proyectos… Y también he renunciado a compartir muchos momentos especiales con mis AMIGAS.

A principios de septiembre me perdí como Anaiiis cumplía años.

Hoy 15 de noviembre es el cumpleaños de Marina, y yo no estaré ahí para verla soplar las velas mientras pide, con todas sus fuerzas, que se cumpla su deseo.

Marina, renuncié a no celebrar tu cumpleaños junto a ti, pero no renuncié a celebrarlo, a desearte lo mejor, a hacerte sentir cerca de mi… a eso no renunciaré nunca. Casi, casi me parte el corazón no poder celebrarlo junto a ti, junto a vosotras, chicas… y por eso pongo todo de mi parte para que sea más llevadera la distancia.

Para que me sientas a tu lado cuando pides el deseo… no pienses en este día, sino en todos los días que nos quedan por disfrutar juntas.

¡¡Feliz Cumpleaños, Marina!!